Cómo secar el cabello sin dañarlo

Lo primero es eliminar toda el agua que puedas con la toalla  haciendo suaves presiones a lo largo de los tallos, sin retorcerlos ni frotarlos entre sí para que el cabello no se enrede.

 Una vez eliminada la humedad, es recomendable aplicar un protector térmico y secar con el secador a una
temperatura media y a una distancia de unos veinte centímetros del pelo.
Seca primero la nuca y después los laterales y, a medida que el cabello se va secando, disminuye la temperatura y la potencia del aire.

Por: Lucía Martín